En este mundo traidor / nada es verdad ni mentira / todo es según el color / del cristal con que se mira.

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Curiosidades del acento

Algunas de las experiencias más curiosas en mi vida se han dado debido al acento o entonación que tengo al hablar. Cualquier persona que me escucha, se da cuenta de inmediato que soy chileno. No obstante, con mis 79 años, resulta que he vivido más de la mitad de ellos en Costa Rica (donde llegué por primera vez hace 47 años). Me parece que soy un caso raro, ya que muchos amigos con experiencias parecidas a la mía asimilaron rápidamente el acento o la forma de hablar el idioma español de sus patrias adoptivas. Incluso, mi propia esposa, Marie Jeanne Oliger Salvatierra (1951-2003), fue un buen ejemplo de ello, ya que, al poco tiempo de llegar a Costa Rica, hablaba como “tica”. Más de una persona le preguntaba extrañado porqué y cómo se había enamorado y casado con un chileno.

Ricardo Anzola Betancourt: El Arquitecto del Turismo en las Américas

Este 27 de septiembre de 2020, en el marco del “Día Mundial del Turismo”, y cuando recordábamos la fundación de la Organización Mundial del Turismo (OMT), recibí una muy triste noticia. Falleció uno de mis amigos más apreciados en la vida, Ricardo Anzola Betancourt.

Año 1971. Congreso Interamericano de Turismo, Buenos Aires, Argentina. Firma del Acta de Fundación del CICATUR de la OEA. Sentados el secretario de Estado de Turismo de Argentina, el ministro de Turismo de Venezuela, Diego Arria, y el director de Turismo de Panamá, José Rogelio Arias. De pie, Carlos Ruibal, representante del Perú y director del Plan COPESCO, Ricardo Anzola Betancourt, Director de la División de Turismo de la OEA, Carlos Lizama Hernández, Director de Turismo de Chile, y Luis Zalamea, Director de la South American Travel Organisation (SATO).

Mi madre y la reina

Mi madre junto a mis cuatro hijos en nuestra casa de Curridabat, Costa Rica, en el año 1986.

Para los hijos, las madres son siempre reinas. La tradición matriarcal, ha sido fuerte en mi vida. Mi padre, Carlos Alberto Lizama Poblete (1906-1960), quien murió a los 54 años, me transmitió este sentido matriarcal cuando hablaba con emoción de su madre, mi abuelita, Juanita de Dios Poblete Zapata de Lizama. No la conocí, ya que falleció en el año 1942, el mismo de mi nacimiento. En la rama materna, mi abuela, Teresa Grebe de Hernández, que vivió más de cien años, fue durante muchas décadas, el centro aglutinador de centenares de familiares, que sentían en ella el tronco común.

Recordando a Oswaldo Guayasamín en su vasija de barro

Año 1996. Visita a Quito, Ecuador, para conversar sobre el proyecto de Galería Guayasamín en Costa Rica. En la foto, Oswaldo Guayasamín y Antonio Salvador junto a Marie Jeanne Oliger y Carlos Lizama.

Oswaldo Guayasamín (1919-1999), uno de los más grandes artistas plásticos de Latinoamérica, dedicó la mayor parte de su vasta obra a rescatar y elevar el conocimiento sobre los pueblos originarios del continente. En sus dramáticos trazos de los rostros, cuerpos y grandes manos de sus personajes indígenas, con sus tradiciones y cultura, lograba transmitir de forma aguda el sufrimiento de la larga y oscura noche que vivieron. Sus obras provocan un impacto enorme en la conciencia de sus espectadores, algo que era una marca de su gran talento. Lo hizo en la pintura, en la escultura y en la orfebrería, al igual, que en su palabra siempre valiente y poética.

Editado por Mauricio Lizama Oliger