• Un segundo aeropuerto cercano a la Región Metropolitana y protegido de los efectos de una eventual erupción, debería ser de la máxima prioridad para el país y el Sector Turismo costarricense.

La erupción del volcán Irazú, que se inició el 14 de marzo de 1963 y que concluyó el 18 de diciembre del año siguiente, es el fenómeno de la naturaleza más dañino y prolongado que ha sufrido Costa Rica, en su historia republicana. Afectó directamente toda la región metropolitana, o Meseta Central, como se la llamaba en aquella época. Durante esos fatídicos 19 meses, miles de toneladas de cenizas, sedimentos volcánicos y gases cayeron sobre las ciudades, pueblos, campos y ríos cubriéndolos de un espeso manto gris y cambiando dramáticamente la vida de sus habitantes.